
El viaje es una experiencia fascinante para quienes lo toman en serio. Para quienes no se les ha transformado en una aburrida rutina de negocios. Está bien, a uno jamás le pasará eso porque no tiene tiket mi para EFE y el negocio más grande que hace es trabajar a honorarios. Para los hijos de vecino el viaje es un transporte al anhelo. Mis viajes son interiores, más baratos y quizas más peligrosos (al parecer malatesta está con parálisis en un hospital de Tome). Ahora si se tratara de ir a algún lado, me gustaría ir donde el cortejo sea una experiencia vital fundamental. Donde son machistas,si, porque en todas partes son machistas, pero justifican su calidad con una cosmovisión intensa y sensual. En algunas latitudes el abuso a la mujer va acompañado nada más que por un completo y una chela en una fuente de soda con cucarachas o un carrete rancio en algún sucucho. En fin, dos videos para seguir entuciasmándome.
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