fomes fragmentos de una frivola identidad perturbada

La diversidad se confunde con la dispersidad. MMM ¿Qué yo acaso creo que descubro la pólvora? No señores y señoras. Simplemente pongo en evidencia lo que está haciendo estornudar. El moquillo me da asco, más cuando es absorbido por el pañito para secar los platos.

Brunner, esa mente iluminada, incapaz de volverse buena política pública, lo dice bastante claro y yo solamente lo morfo o lo amorfo en lenguaje vulgar y femenino. No es que yo subestime al querido espía o que me quiera hacer la chica maravilla. Simplemente me entretiene decir que el mercado homogeniza con sus leyes económicas haciendo que el tapiz que cubre al mundo sea el mismo en todas partes: embarrado y cagado por las botas del ogro feroz.

Este tapiz tiene colores que intentan ser una copia barata de un mandala. Mediante fragmentos dispersos: grupúsculos que compran su identidad a crédito, especímenes artificiosos bajo leyes que rigen el globo, se conforma una sociedad "plural". Libertinaje estético que teje con un hilo fermentado y débil un puente destinado a caerse, separando por fin la razón del corazón.

El neoliberalismo funciona, reduce la pobreza, otorga oportunidades, bienestar y reconocimiento. Me quejo de llena. ¿Que acaso me afecta no sentirme única, o es que soy tan individualista y absoluta, engreída y caprichosa que no me interesa postergar mis impulsos de solista? ¿Es que soy más neoliberal que el neoliberalismo? ¿o es que acaso mi complejo de superioridad o de inferioridad (son mortalmente parecidos) me hace negarme a la competencia? Definitivamente. Que quieren que les diga queridos agentes, respetable público, me encanta y disfruto no tener que someterme a los dictámenes de la mayoría, porque más de lo mismo me aburre. Siento el vértigo de las ideas confundidas en mi estómago, los deseos y las pulsiones que se arrebatan en un gesto.

Escribo porque es onanismo puro. Cada tecleo produce en la punta de mis delgados y largos dedos una sensación placentera y vital. Por otra parte que usted se moleste en leerme para molestarse, me parece cómico. Que usted se figure que yo soy un figurín coleccionable o un personaje de pantalla, reducido a este escaso fragmento en el no lugar, me reconforta. Me hace estar cada vez más en lo correcto con respecto a la opinión pública.

¿Qué si no me da vergüenza? queridos y queridas fisgonas, yo nada más soy una investigadora empírica. La experiencia es fundamental para esta pobre chica y no puedo ser más que yo el objeto de estudio en esta débil y ridícula estadía. ¿Quiere que le cuente más? ¿No está satisfecho? nunca lo estamos, a pesar de la sangre amarilla que imprime cada letra en las gacetas y las entrañas que se pasean presuntuosas frente al lente. Necesitamos historias verdaderas. Es que la hipocresía nos salva de tantos líos, pero a la vez nos hace sentir tan ajenos y vacíos. En verso. Una cacofonía más, escolar, básica, una forma del lenguaje que quizás me determine a un calificativo. Aunque sea sólo un fragmento de este texto. Cada uno es un editor, intentamos escribir en el otro mediante la crítica y la censura, sin atrevernos nunca a crear textos propios.

Ahora otro pedazo de intimidad para ustedes voraces y reduccionistas. Bienvenidos a un show gratuito, tan bizarro como una joven que antes de quemarse a lo bonzo, procede a raparse como Britney y a echarse ají en los ojos como en una performance japonesa. Un correo que hoy hago público, como el que leyeron no solo para sentir lástima, sino para reír a carcajadas...por que tu sabes que él tiene llaves y que puede sorprenderme cuando quiera para aleccionarme y enseñarme a ser humana.

"Se bastante de los héroes de los ochenta, lo importante es que no se hayan vuelto veteranos de guerra conformes con evocar un pasado más mártir que glorioso, que justifica un presente redimido en alguna oficina de la Concertación. Entiendo lo de las revoluciones burguesas y en este sentido al igual que Trotsky, soy luchadora incansable en contra de la hipocresía "menchevique". Jajaja. Me apestan los socialistas reaccionarios, sin que eso quiera decir que a la vez me encante tratar con ellos en disputas bizantinas.

Es cierto, de hecho los fenicios, primitivos globalizadores, utilizaron como herramienta el lenguaje para la apertura de los mercados. Pero también es cierto que el lenguaje humano y la comunicación es la que evidencia la existencia del alma, que Kafka, Balzac, Henry Miller, Roberto Arlt, Debord, entre tantos, mediante este formato de comunicación pudieron plasmar un pensamiento "liberado", provocador, crítico que se ha convertido en parte de un discurso transparente, aún cuando estos seres no sirven ni como comida de gusanos.

No te puedo contar nada de mi vida, no tengo más que decirte. Además no digamos que tú me has contado de tu vida, simplemente de tu trayectoria que es algo apegado a las experiencias externas, vinculantes a la estructura. Para algunos es gravitante; yo intento no justificar mi existencia y no hacer sacrificios para merecer vivir.

Entiendo tu postura, comprendo que algunos fueron sumamente castigados, que "metieron la cabeza al water". Ese recuerdo amargo a veces hace tapar el sol con un dedo y refrescarse a la sombra del progreso "democrático". Yo quizás soy muy intransigente y lo más probable es que siempre se me dirá que me dé con una piedra en el pecho, pues no viví la represión dictatorial.

Con respecto al periodismo, me interesa transmitir los mensajes subalternos, los que fiscalizan no a los delincuentes ni a los ambulantes; no me interesa la gaceta amarilla ni el panfleto facilista y autoflagelante. Prefiero mi ojo, mi subjetividad. Me acepto estalactita, me reconozco caída del catre y animita olvidada. Escribo desde lo que soy, no alcanzo para más que mi personaje y es por eso que no tengo chapas. Luego de esta declaración de principios, podrás darte cuenta porqué no tengo trabajo, y me cuesta mucho creer en el periodismo como fuerza movilizadora. Tengo bastante claro como actúa el periodismo en Chile y el mundo y qué nivel de representatividad tiene en la construcción de "realidad". Me mantengo sumamente al tanto de lo burgués que resulta la tarea narrativa, ya sea por la contribución al status quo, como al de la historia oficial, lineal y "verdadera".

Por último el amor provenzal es una figura que me interesa mucho más, pero el don Juan llegó para quedarse y simplemente una debe de adaptarse a lo que se ofrece".

Y aquí un videito simpático para tí que estas aburrida en casa...

SUBVERSO (última entrega que ha dejado helados a los mencheviques y meritocratas)